Roxana Suárez, mamá de Andry de 5 años, agradeció personalmente a la misión médica, al cónsul de los EE. UU y a la Junta de Beneficencia por la cirugía de su pequeño hijo. “No sabía qué hacer cuando supe que a mi niño tenían que operarlo y gracias a ustedes ahora está ya está recuperándose de su cirugía. Los médicos, la atención y el cuidado de todos han sido de lo mejor en este hospital” comentó.