La inclusión educativa se ha vuelto un tema de gran relevancia en el ámbito educativo actual. En este sentido, Lourdes Gómez, docente de la Unidad Educativa José Domingo de Santistevan de la Junta de Beneficencia destaca la importancia de acercarnos a los estudiantes con necesidades distintas para comprender sus requerimientos específicos.
“Es esencial tener en cuenta que una necesidad no implica necesariamente una discapacidad, ya que existen diversas necesidades en el mundo contemporáneo a las que a menudo no se les otorga la importancia adecuada para implementar estrategias apropiadas”, sostiene la Docente del Santistevan.
El objetivo principal es garantizar una buena calidad de vida y un desarrollo significativo para cada estudiante. En este contexto, Gómez comparte las siguientes recomendaciones:
- Acercamiento al estudiante: El primer paso es acercarse a cada estudiante para descubrir qué tipo de necesidad tiene y brindarle el apoyo adecuado.
- Entender que una necesidad no es una discapacidad: Es fundamental comprender que existen distintas necesidades entre los estudiantes, no todas son discapacidades.
- Jugar el rol de padre: Ponerse en el lugar del padre de familia permite tener una clara idea de lo que se espera que cada estudiante aprenda.
- Aplicar estrategias adecuadas: Para mejorar el ambiente en el aula, es necesario implementar estrategias que satisfagan las necesidades individuales de los estudiantes.
- Construir puentes de conexión: El trabajo tanto a nivel individual como colectivo se fortalece a través de puentes de conexión, fomentando un ambiente de cooperación y apoyo mutuo.
- Preparar un grado o curso para que los estudiantes aporten: Es importante crear un ambiente propicio para que los estudiantes puedan aportar según sus habilidades y fortalezas.
- No permitir el acoso escolar: Se debe considerar que algunos estudiantes pueden ser crueles y herir verbalmente a sus pares, por lo que es esencial actuar en la prevención del acoso escolar.
- Trabajar con talleres y herramientas: Los talleres y herramientas son excelentes recursos para apoyar el aprendizaje de los estudiantes con necesidades distintas y ayudarles a progresar.
- Conseguir el ambiente necesario: La creación de un ambiente propicio es una condición fundamental para implementar cualquier estrategia de apoyo individual o específica.
- Dotar de espacios físicos para trabajar en grupo: Las instituciones deben proveer espacios físicos donde los estudiantes puedan trabajar en grupo de manera cooperativa y con libertad de movimiento.
En conclusión, es primordial que las instituciones promuevan la cooperación, la aceptación de las diferencias y el respeto entre los estudiantes. Solo así lograremos una educación inclusiva y de calidad, brindando a cada estudiante la oportunidad de alcanzar su máximo potencial.