
En un acto de fe y esperanza, el Panteón Bosque de la Vida de la Junta de Beneficencia (JBG), junto con la Arquidiócesis de Guayaquil, celebrará este domingo 9 de noviembre, a las 12h00, una misa campal dedicada a los niños no nacidos y no bautizados, en el pabellón María Madre de Nacidos y No Nacidos del camposanto.
La ceremonia, que se ha convertido en una tradición de la institución, busca honrar la vida desde su inicio y acompañar a las familias que han enfrentado la pérdida de un hijo antes o poco después del nacimiento.
Durante la eucaristía se realizará el rito del bautizo y la inhumación de tres bebés, cuyas familias estarán presentes para despedirlos y encomendar su memoria a Dios. Con ellos, ya serán más de doscientos pequeños los que reposan en este espacio memorial que la Junta de Beneficencia donó especialmente para brindar cristiana sepultura a los no nacidos.
La misa será presidida por Monseñor Gerardo Nieves, Obispo Auxiliar de Guayaquil y presidente de la Comisión Episcopal de Educación y Cultura de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, y concelebrada por Monseñor Aníbal Nieto, Obispo Emérito de San Jacinto, junto a varios sacerdotes de la ciudad.
Además de su profundo significado espiritual, esta ceremonia tiene como propósito dar visibilidad al duelo perinatal, un proceso muchas veces silenciado, ofreciendo a sus familias un espacio de consuelo, oración y encuentro con la fe.
Como símbolo de amor y esperanza, estará presente la Campana de los No Nacidos, traída desde el Vaticano y bendecida por el Papa Francisco. Al finalizar la misa, los asistentes podrán hacerla sonar en memoria de todos los niños que no llegaron a nacer, como gesto de oración y vida eterna.
La Junta de Beneficencia de Guayaquil invita a toda la comunidad a participar en este acto de reflexión, fe y solidaridad, acompañando a las familias en un momento de profunda significación humana y espiritual.